Esquema del capítulo
El sonido es un ejemplo de onda mecánica, concretamente, una onda de presión: las ondas sonoras se desplazan por el aire y otros medios en forma de oscilaciones de moléculas. La audición humana normal abarca un impresionante rango de frecuencias de 20 Hz a 20 kHz. Los sonidos inferiores a 20 Hz se denominan infrasonidos, mientras que los superiores a 20 kHz se llaman ultrasonidos. Algunos animales, como el murciélago que aparece en la Figura 17.1, pueden oír sonidos en el rango de los ultrasonidos.
Muchos de los conceptos tratados en la sección Ondas también tienen aplicaciones en el estudio del sonido. Por ejemplo, cuando una onda sonora encuentra una interfase entre dos medios con rapidez de onda diferentes se produce la reflexión y la transmisión de la onda.
Los ultrasonidos tienen muchos usos en la ciencia, la ingeniería y la medicina. Los ultrasonidos se usan para hacer pruebas no destructivas en ingeniería, como la comprobación del grosor del revestimiento sobre el metal. En medicina, las ondas sonoras son mucho menos destructivas que los rayos X y se pueden usar para obtener imágenes del feto en el útero de la madre sin peligro para ninguno de los dos. Más adelante en este mismo capítulo hablaremos del Efecto Doppler, que se puede utilizar para determinar la velocidad de la sangre en las arterias o la velocidad del viento los sistemas meteorológicos.